La viruela del mono seguirá siendo viruela y seguirá conservando su origen infeccioso con los simios, aunque en un año ya no volverá a llamarse así para la OMS.
Hace ya muchos años, en 1958 para ser exactos, el virus de monkeypox se descubrió activo y contagioso en monos cautivos, provocando una enfermedad transmisible a los seres humanos que aún hoy sigue en pie; y que dos años después, en 1970, fue bautizada como viruela del mono. Ahora, la organización Mundial de la Salud (OMS), ha dado la espalda a dicho nombre globalmente conocido, esgrimiendo la publicación en 2015 de las mejores prácticas de la propia entidad en materia de la denominación de enfermedades para justificar dicho cambio nominativo.
El virus del simio renueva su identificación
El anuncio, emitido este lunes por la OMS a través de un comunicado, subraya el cambio de nombre de la viruela del mono y detalla que a partir de ahora se denominará ‘mpox’, en clara alusión a la abreviación monkeypox, el nombre original en inglés del patógeno. ¿Y por qué? A fin de evitar el «lenguaje racista y estigmatizante», en palabras de la propia entidad sanitaria de la ONU.
Cabe aclarar, en este punto, que ya había un proceso en marcha para reconsiderar la denominación de todas las especies de ortopoxvirus antes incluso de que se declarara el brote mundial de viruela del mono de este año; una campaña en la que también estaba incluido el virus de la viruela del simio.
A partir de ahora, ambas denominaciones, ‘mpox’ y ‘monkeypox’, se utilizarán simultáneamente durante un año, según han informado desde la entidad que dirige Tedros Adhanom Ghebreyesus, a la par que el término ‘viruela del mono’ irá eliminándose «progresivamente» del vocabulario de la OMS.
Y es que, a ojos del organismo sanitario internacional de Naciones Unidas, el término viruela del mono genera varios problemas y a muchos niveles, además.
«Cuando el brote de viruela del mono se extendió a principios de este año, se observó y se informó a la OMS de un lenguaje racista y estigmatizante ‘on line’, en otros entornos y en algunas comunidades. En varias reuniones, públicas y privadas, varias personas y países plantearon su preocupación y pidieron a la OMS que propusiera una vía para cambiar el nombre».
Toda una asignación a las enfermedades nuevas cuya responsabilidad recae actualmente en la OMS, igual que la potestad de cambiar el de las ya existentes, si bien esto es de manera aún más excepcional, siguiendo el marco de la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE) y de la Familia de Clasificaciones Internacionales Relacionadas con la Salud, en un proceso consultivo que involucra a los Estados miembros de la entidad.
De esta forma, y tras celebrar una serie de consultas para recabar las opiniones de varios expertos, el organismo ha optado por decirle adiós al término ‘viruela del mono’, tomando en consideración también las sugerencias de los países y del público en general, a los que se invitó a presentar sugerencias de nuevos nombres.
Una renovación que tendrá registros en las cláusulas de la OMS
Así, desde ahora habrá que empezar a utilizar ‘mpox’ para mencionar a la enfermedad causada por el virus del simio en sustitución de ‘monkeypox’, tras un periodo de transición de un año.
«Esto sirve para mitigar las preocupaciones planteadas por los expertos sobre la confusión causada por un cambio de nombre en medio de un brote mundial», explicó al respecto de este anuncio el organismo liderado por Ghebreyesus. «También da tiempo a completar el proceso de actualización de la CIE, y a actualizar las publicaciones de la OMS», un término que durante los próximos días se incluirá en la CIE-10 ‘on line’.
‘Mpox’, además, formará parte de la versión oficial de 2023 de la ‘CIE-11’, la norma mundial actual para los datos sanitarios, la documentación clínica y la agregación estadística; un proceso de actuación que, si bien suele durar varios años, normalmente, ha sufrido un acelerón en este caso, siguiendo eso sí los pasos habituales.
Hablamos de una guía de la OMS que, según sus propios términos, brinda nuevos nombres a las enfermedades; nombres que tienen que «minimizar el impacto negativo innecesario de los nombres en el comercio, los viajes, el turismo o el bienestar de los animales; y evitar causar ofensa a cualquier grupo cultural, social, nacional, regional, profesional o étnico».
Para la OMS, ‘mpox’ tiene una traducción bastante universal, ya que puede utilizarse en lenguas muy utilizadas como el español, según la OMS; aunque el organismo ya ha avanzado que «si surgen otros problemas de denominación, se abordarán mediante el mismo mecanismo», remachando al respecto y como última explicación al rebautizo de la viruela del mono que «las traducciones suelen discutirse en colaboración formal con las autoridades gubernamentales pertinentes y las sociedades científicas relacionadas».