La Dirección General de Tráfico (DGT) pone especial atención a las causas de los accidentes de tráfico; pero también a las actuaciones una vez que suceden.
En plena campaña de control especial con el foco puesto en las distracciones en carretera por parte de los conductores, la Dirección General de Tráfico (DGT) prosigue con su intención de reforzar y hacer buena la nueva Ley de Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, vigente desde hace seis meses.
Una serie de variaciones en cuanto a las sanciones por incumplir las normas y atentar contra la seguridad vial que han traído consigo un endurecimiento que se ve reflejado en los puntos, pasando de 3 a 6 puntos por conducir con un dispositivo móvil en las manos.
La Dirección General de Tráfico (DGT) pone especial atención a las causas de los accidentes de tráfico; pero también a las actuaciones cuando suceden
Más allá de esto, y con el objetivo claro de evitar o, en su defecto, minimizar al máximo los accidentes de tráfico, la DGT establece una serie de consejos a seguir tras un siniestro; especialmente si en el mismo hay niños implicados.

Consejos a seguir tras un accidente, según la DGT
Así, el propio organismo ofrece una serie de consejos a seguir una vez que el accidente se produce, con especial incidencia a los más pequeños implicados en el siniestro:
«-Aplicar el protocolo PAS. Proteger, avisar y socorrer. La primera reacción en un accidente de tráfico debe ser proteger la zona del siniestro para evitar nuevos riesgos, y una vez hecho esto, es el momento de llamar a los servicios de emergencia 112 y socorrer a las posibles víctimas, siempre usando el chaleco reflectante cuando se sale fuera del vehículo.
– Estacionar el vehículo en lugar seguro. Si las circunstancias lo permiten se recomienda activar las luces de emergencia y esperar a que llegue la ayuda.
– No invadir la calzada. La DGT prohíbe transitar por autovías y autopistas. Solo se permite estar en la carretera par prestar colaboración y evitar que se produzcan mayores peligros o para restablecer la seguridad de la circulación. Siempre debe llevar un chaleco reflectante de alta visibilidad homologado.
– No perder los nervios. Sobre todo cuando hay niños implicados en el accidente, ya que los familiares no mantienen la calma y en muchos casos su actitud puede conllevar una actuación perjudicial.
La DGT recomienda, tras un accidente, deshacerse del sistema de retención infantil (SRI) o pedir que se examine por un especialista, aunque presente un buen estado, al existir la posibilidad de que este tenga daños internos no visibles a simple vista
– No mover al niño. En un accidente no es conveniente desplazarlo, ya que se puede causar lesiones en la zona de la columna vertebral.
– Cuando la víctima presenta hemorragias se debe taponar la herida y presionar con la mano hasta que lleguen los sanitarios.
– Tapar al niño. Da igual que las temperaturas sean altas, es importante cubrirlo para que no pierda calor, pero sin sobrecalentar ni hacerle sudar.
– No darle comida ni agua. La ingesta de cualquier alimento, bebida o medicación le puede provocar vómitos o que incluso pierda la conciencia.
– Mantenerse al lado del niño y tranquilizarlo en caso de que sea necesario hasta que lleguen los servicios de emergencia».