Las webs en la actualidad deben ser accesibles para facilitar el acceso a la información. Los mensajes deben ser cortos y directos y si es posible, traducirlos a lectura fácil.
Internet continúa siendo un territorio inalcanzable para la gran mayoría de las personas con discapacidad del mundo, como denuncia el consorcio internacional World Wide Web Consortium (W3C) a través de su iniciativa Web Accessibility Initiative (WAI).
Cerca de cuatro millones de personas encuentran muchas barreras aún para acceder a las webs si bien la sociedad cada vez es más inclusiva y está normalizado el uso de las mismas en modo accesible.
La accesibilidad web combina la programación, el diseño y la tecnología para construir un Internet sin barreras que permita a todos los usuarios el entendimiento, el aprendizaje, la navegación y la plena interacción con la web.
Para ellos es necesario como empresa facilitar el acceso a todo aquel que llegue a la misma dado que mejora la imagen de marca e implica a todos los colectivos on discapacidad. La inclusión en este caso es un factor que suma y permite que todos lean en igualdad de condiciones.
Por otro lado, se extiende al mercado global de personas con discapacidades diferentes que alcanza los mil millones de personas y por ello, la accesibilidad permite tener más lectores. La accesibilidad web depende de muchos componentes trabajando juntos, incluyendo tecnologías web, navegadores y otros «agentes de usuario», herramientas de autor y sitios web.
Los sitios web accesibles, además, se benefician de otros aspectos: el aumento de visitas potenciales, una mayor velocidad de carga, la mejora en el posicionamiento y la reputación online (TrustRank), el ahorro de ancho de banda, una mayor compatibilidad con navegadores y dispositivos, entre otros factores.
La Iniciativa de Accesibilidad Web del W3C (WAI (en Inglés)) desarrolla especificaciones técnicas, pautas, técnicas y recursos que describen soluciones de accesibilidad. Estos son considerados estándares internacionales para la accesibilidad web; por ejemplo, WCAG 2.0 son también estándar ISO: ISO/IEC 40500.
Pasos sencillos, como cambiar la configuración del navegador, pueden ayudarle a evaluar algunos aspectos de la accesibilidad. Una evaluación exhaustiva para determinar si un sitio web cumple con todas las pautas de accesibilidad requiere más esfuerzo.
Por otro lado, se pueden tener pautas para crear contenidos accesibles y compatibles con todo tipo de tecnologías de apoyo, dispositivos, navegadores y lenguajes de programación. Contemplan el uso de letras de gran tamaño, diseños adaptativos, textos predictivos, asistentes a la navegación, etcétera, así como pautas destinadas al desarrollo de los programas necesarios para interactuar con el contenido web, como los navegadores, los reproductores multimedia, los lectores de pantalla.
Existen herramientas que ayudan en la evaluación. Sin embargo, ninguna herramienta por sí sola puede determinar si un sitio cumple con las pautas de accesibilidad. Se requiere una evaluación humana bien experimentada para determinar si un sitio es accesible.