Los dieciséis museos estatales de España gestionados por el Ministerio de Cultura atraviesan una delicada situación.
Ir a un museo se ha convertido en una de las actividades preferidas para muchas personas. Ahora, gracias a las nuevas tecnologías, también es posible disfrutar de las obras de muchos de los emplazamientos más destacados de Madrid sin salir de su propia casa.
Situación de los museos estatales
El problema radica en los 16 museos estatales gestionados por el Ministerio de Cultura. Y es que, según denuncian sus trabajadores y los sindicatos, los vigilantes de seguridad no pudieron irse de vacaciones el verano pasado ya que esa era la única manera que tenía la dirección del museo para no cerrar durante esos meses.
«La cobertura de los puestos adscritos al área de seguridad está siendo extremadamente dificultosa, por no decir, casi nula»
Juan Francisco Melgar Jaquotot, subdirector gerente del Museo Nacional Reina Sofía (Madrid)
Esta situación implica que, desde hace más de un año, estos 16 emplazamientos están sufriendo cierres completos o parciales de salas, ya que las bajas no se reemplazan. De hecho, según señala el sindicato UGT, actualmente en España «se necesita incorporar de manera urgente al menos a 80 personas en estos puestos de seguridad para que los museos vuelvan a tener un acceso acorde a la Constitución (artículo 44)».

Aunque el asunto de los vigilantes de seguridad es muy delicado, no es el único puesto de trabajo que se está viendo afectado por este problema. Desde el pasado mes de julio, varios de los 16 museos estatales están teniendo dificultades a la hora de contratar personal para trabajar en taquilla. No se reemplazan las bajas: da igual que sea por un contrato temporal o por una jubilación.
El salario medio de un vigilante de sala es de 18.000 euros brutos al año
Una campaña para tapar carencias
Como no había taquilleros para cobrar las entradas, varios museos realizaron una campaña de ‘puertas abiertas’ y entrada gratuita. «Lo de este verano fue mentira: no había personal para cobrar la entrada y los abrieron gratis», explica Lucía, vigilante de sala en el Museo del Romanticismo (Madrid).
«No se podía cobrar, por eso fueron gratis los museos hasta finales de septiembre. El problema es que desde entonces no se ha solucionado la situación. Seguimos igual»
María, trabajadora en el Museo Arqueológico (Madrid)
Además, Lucía apunta: «a mí ahora me obligan a estar en taquilla, porque no quieren cerrar. No importa si solo enseñemos la mitad del museo. Solo mostramos 13 de 26 salas. Esto es un servicio público y debería estar en pleno funcionamiento. Las reclamaciones se han disparado, claro. Ahora mismo, no hay dinero ni para uniformes».
El Ministerio pone el foco en el Convenio
Por su parte, el Ministerio de Cultura responde a esta situación y pone el foco en el Convenio: «esta situación es consecuencia de la entrada en vigor del IV Convenio Único del personal laboral de la Administración General del Estado. Su ejecución ha generado una reducción de las plazas necesarias para poder ofrecer el servicio al público con normalidad».
«Estamos viviendo cierres puntuales de algunos museos estatales»
Comunicado Ministerio de Cultura
Además, el Ministerio de Cultura añade: «se trabaja activamente para buscar soluciones con el Ministerio de Función Pública y poner en marcha mecanismos que permitan paliar la situación y completar las plantillas de personal, de modo que podamos seguir garantizando la apertura ordinaria de los museos».
«Es un mero problema administrativo y burocrático y el Ministerio de Cultura es incapaz de proponer una fórmula a Función Pública para resolver un problema desde hace dos años», responde el sindicato de UGT ante estas declaraciones del organismo público.