El ocio inclusivo es un compromiso de todos y para todos. Viajar, ir al cine, explorar museos, hacer deporte, respirar naturaleza… pocos placeres se pueden comparar al gusto de tener tiempo libre y hacer con él lo que más nos plazca.
De hecho, el ocio es un derecho fundamental y constitucional (artículo 49 de la Constitución Española) una fuente de libertad garantizada a la que las personas con discapacidad, por fin, ya pueden empezar a echar mano. Y todo, gracias a un ocio que cada día se vuelve más accesible a todos.
Derribando puertas
Hablar de ocio inclusivo es hablar de actividades de ocio pensadas, planteadas y diseñadas para el uso y disfrute de las personas con discapacidad. Dicho de otra forma, son actividades lúdicas o recreativas o culturales que han sido adaptadas a las diferentes necesidades de las personas con discapacidad, cualquiera que sea su tipo, teniendo en cuenta sus carencias y respondiendo en consecuencia a esas deficiencias, para que pueda disfrutar de ella igual que el resto de la gente, a pesar de su incapacidad motora, psíquica o sensorial.
El hecho de que una persona vaya en silla de ruedas no significa que no pueda hacer senderismo, después de todo; y que alguien no vea no quiere decir que no pueda seguir una película, serie u obra de teatro, ¿verdad?
Gestionar el tiempo libre, y hacerlo a gusto de las ociosidades escogidas, sin que en su realización interfiera una incapacidad sensorial o motora o psíquica, es un planteamiento que la Organización de naciones Unidas (ONU) en su Convención sobre los derechos de las personas con discapacidad, estableció como un derecho y, por tanto, algo que países, instituciones, empresas y profesionales deben subrayar y aprobar y adoptar.
El ocio inclusivo, una urgencia en actualidad
El ocio inclusivo es una actividad moderna, una invitada del tiempo libre que no obstante ha llegado para quedarse. No es de extrañar, teniendo en cuenta sus ventajas. Unas ventajas que es preciso entender, para verle el lado bueno de sus efectos y sacarle partido.
Sus efectos son buenos tanto a nivel empresarial como al colectivo de sus usuarios, clientes a los que va dedicado, pues es un ocio pensado para todos; un ocio que no excluye, más bien integra.
Ventajas a nivel empresarial.
Quien dijo que satisfacer las necesidades del cliente es el primer paso de toda empresa que busca triunfar, tenía razón. Así, la empresa se gana una fama merecida, su imagen pública mejora, recauda clientes que van a apostar a su favor.
En este sentido, las empresas que apuestan por adaptar sus actividades a las diferentes discapacidades se ganan clientes que no solo saldrán satisfechos, sino que además repetirán, lo recomendarán, se fidelizarán… harán que los gastos empleados sean una inversión de lo más rentable.
Ventajas a nivel personal
El ocio beneficia a todo el mundo, a todos. Ya sea el que se realiza en grupo o bien sea el que hace uno por su cuenta, de forma individual; no importa, porque el resultado es siempre positivo. Por la sencilla razón de que su simple actividad transmite valores fundamentales de aprendizaje, desarrollo social, cultural, físico y personal. Las personas con discapacidad no están al margen de estos efectos, de ahí la buena acogida y el auge, cada vez mayor, del ocio inclusivo.
Y es que una actividad de ocio bien adaptada hace crecer un sentimiento de comunión y pertenencia en las personas con discapacidad con el resto de la gente, un sentimiento de identificación hacia ese colectivo que comparte el mismo viaje de destino, que festejan con sudor las metas alcanzadas en el deporte, que comentan la misma película o serie u obra de teatro, que admiran las exposiciones del mismo museo. En dos palabras: integración e interdependencia.
¿Cuáles son los efectos psicológicos del ocio inclusivo?
Tal vez, el mayor éxito del ocio inclusivo reside en los efectos psicológicos, positivos, que causa en quienes lo practican. Sus efectos son numerosos, ciertamente.
- Supone una inyección de estabilidad emocional: combate el estrés, aporta bienestar, empuja a la automotivación y a la autoestima, abraza la empatía, favorece el crecimiento personal, reafirma el vínculo con la creatividad.
- Tiende un puente a la mejora de la salud: apoya la tranquilidad mental, apuesta por la rehabilitación de cualquier dolencia física, aúna fuerzas con la movilidad, minimiza las distancias físicas entre quienes tienen discapacidad y quienes no.
- Es un mecanismo a favor de la integración: fomenta el respeto mutuo y hacia otros, asiente a favor de la colaboración, lucha contra el aislamiento y la depresión, azuza la disciplina, mejora las habilidades sociales, incentiva la capacidad de adaptación, alimenta la confianza en uno mismo y en los demás.
Ocio inclusivo: transformando las actividades
Aunque está en crecimiento, el ocio accesible sigue necesitando de ayuda, pues todavía hay barreras para su expansión, limitaciones que salvar. La oferta de ocio inclusivo, de hecho, aún tiene mucho por abarcar, mucho por hacer. ¿Cómo convertir una actividad genuina de ocio en una actividad accesible e inclusiva? Ante todo, es necesario contar principalmente con mediadores, recursos técnicos de ayuda, profesionales que organicen y coordinen la actividad que se tenga en mente adaptar.
Expertos que puedan derrumbar barreras, que sepan traducir una dificultad en una posibilidad accesible, una oportunidad para todos.