Dos hombres se encuentran en la frontera que separa la realidad de la ilusión, la cordura de la locura, lo cercano de lo lejano; que separa, en definitiva, la identidad de la nada.
Dos hombres dialogan , discuten y se enfrentan mientras recorren la incierta, fina e invisible línea sobre la que hacen equilibrios, ensayan volatines y bailan de puntillas.
José Pascual Abellán ha escrito con sobriedad y tersura este duelo de penumbras y miedos, de temblores y temores, de químicas y rescoldos para que Eva Egido Leiva se haga cargo de este material altamente inflamable —es fácil y tentador caer en el tópico, la banalidad y la rutina— para poner en escena certezas y dudas en carne viva, mirada limpia y piel al rojo, algo que no será posible sin la entrega —sincera y contenida— de Richard García Vázquez y Nacho Hevia.
Hipnótica, desnuda y descarnada la función transcurre —encendida e incendiada— hasta un final tan incierto, incómodo e inquietante como eso que venimos a llamar la vida. La vida misma.
Sala El Umbral de Primavera. Sábados de mayo a las 22.15 horas y domingos a las 13 horas
Ficha artística
Elenco: Richard García Vázquez y Nacho Hevia
Autoría: José Pascual Abellán
Dirección: Eva Egido Leiva
Escenografía: Eva Egido Leiva
Producción: LOCOS